lunes, 13 de septiembre de 2004

El mayor placer

Me encanta desayunar. Si pudiera mantener esta sensación de placer todo el tiempo... creo que tendría una sonrisa tremenda y contínua. Sería un paseo orgásmico por el tiempo que nos toca vivir. Un mayor placer añadido me provocaría un orgasmo inmediato. Qué maravilla. Cualquier cosa que ahora me provoca placer se acentuaría con creces. ¡Qué maravilla!. ¿Por qué no podemos elegir nuestro estado de ánimo? Si es muy fácil.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Tengo la solución a tu iniciativa. Enan@ portátil, te cuelgas un midget del pecho y allá dónde vayas, él/ella te proporcionará la saciedad que tú desees :)